Ese el el títular que podemos leer en la edición electrónica de ayer del Corriere della Sera.
Según este periódico un israelí llamado Raanana Shamir, pediatra gastroenterólogo del Schneider Children’s Medical Center en Tel Aviv, propone el alimento que usan los astronautas en sus viajes espaciales como terapia alternativa a los esteroides ayudando a los enfermos pediátricos a conseguir largas remisiones de esta enfermedad crónica (su artículo publicado recientemente en la Revista de Gastroenterología Pediátrica y Nutrición, asegura que el 60-70% de los pacientes ha obtenido una remisión de los síntomas en sólo 6-8 semanas).
Gracias a ello los niños no sufren los efectos secundarios, tales como la malnutrición o el retraso del crecimiento. El tratamiento nutricional en Israel parece tener éxito, aunque el mismo Shamir reconoce que aún no saben la causa real del porqué de su funcionamiento.
Shamir quiere convencer a la comunidad médica que el tratamiento nutricional «de los astronautas» puede tener un papel, al menos en los niños, como tratamiento de primera línea contra Crohn.
Sin embargo, los expertos italianos consultados por el Corriere della Sera piensan que «Hay demasiadas dudas sobre su eficacia real«, en especial por qué el mismo tratamiento no tiene el efecto deseado en los adultos.